y no tiene el brillo
que me desvelaba
Lo miro y me mira
y veo sus ojos,
los ojos de ella
tensos irreconocibles
Las olas se mueven con timidez
y no hay sonrisa de sirena
sentada en la orilla
¿Es una mueca?
¿Una señal?
El canto ha entristecido,
sus manos de arena no me abrazan,
las palabras se enmudecen
Esas caras que se necesitaban
que se buscaban, se sentían,
se apareaban, se imantaban,
volaban.
Ya no se encuentran
¿Habrán perdido el rastro?
¿se habrá atorado su ala en una rama?
Y esos cuatro pies
con los que pedaleábamos
que se convertían en dos
en las pendientes,
hoy se han desentendido;
la ruta y su confusidad
sus autos y el pedalear
¿Habremos conseguido mapas equivocados?
¿O seremos como esta
bajada y subida,
que espera encontrar
un terreno llano?
¿Y atravesarlo de la mano?
Y el viento de este mar
que me llama a estas hojas
y me quiere hacer ver más allá,
levantar mi mirada,
observar el horizonte,
buscar respuestas;
Me grita y me habla,
me dice que aprenda a ver
la otra orilla,
que mientras la espero
que nade y absorba sus energías,
quizá en estos días
nos reecontaremos en una isla
Mientras tanto
esta noche saldré
a buscar noctilucas en la arena
que devuelvan
T!nCh0
20/01/2012
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